jueves, 19 de agosto de 2010

República Checa. Crónicas de un Intercambio. Día 2

DÍA 2: Amanece en Hustopeče

La noche has sido tan corta que es necesario que Marta nos ponga todo su repertorio de musicote en su móvil, temazos que a mi memoria le suenan como el “Tractor amarillo”, “Dónde estará mi carro” (que luego lo descubrimos aparcado en la bolera) y otros cantos similares que hicieron de nuestro despertar una experiencia única. Con paciencia, nos duchamos uno a uno en la única ducha de la guardería-centro social donde dormimos.

Tras un rico desayuno, con mermeladas de cereza y de ‘falsa manzana’, llegaron las 10’30, hora en la que ya conocíamos a algunas de las italianas y su ‘fan culo’… Pero las presentaciones y bienvenidas vendrían después de mano de Eva, una de las “chicas checas”.

Genial la cadena de nombres con su gesto personal asociado, digo genial… porque la mitad de los nombres había que ser un genio para pronunciarlos bien a la primera. Así pasa que con esas rarezas no fuimos capaces de dar ni una jugando al “Duelo de nombres”.

Esa misma mañana establecimos nuestro apartado postal decorando unos sobrecitos para poder mandarnos mensajitos, ¿quién iba a necesitar Tuenti teniendo eso? Y unas pocas reglas de convivencia necesarias, los turnos de ayuda en cocina y las noches nacionales.

Esa tarde después comer un rico plato de ‘arroz delicias checas’, de que los líderes tuvieran su reunión y de un rato de tiempo libre, (siempre bien aprovechado…) nos repartimos en grupos por países y a cada uno le tocó preparar una mini-presentación sobre otro de los países participantes. ESTONIA. ¿Quién sabía algo de ESTONIA en ese momento? =) Aquella noche sí que aprendimos a decir patata en estonio, pero esa tarde… ¡menos mal que Serendipia spanish team iba preparado! Y con una guía genial de lenguas europeas nos defendimos. Pudimos dibujar la silueta del país y quedamos como reyes presentándonos en estonio: “Tere, mina olen Ana.” ¡¡QUE GENIALES SOMOS!!

Antes de tener la cena internacional, hablamos del YOUTH PASS. Y tras esa charleta… ¡¡A HACER TORTILLAS DE PATATAS!!

Esa noche descubrimos cómo se dice ‘patata’ en estonio, ‘Kártol’! al menos, seguro que se p ronuncia así, ¡gracias Kristina por tu paciencia! Ni que decir tiene que las tortillas desaparecieron en ‘cero coma’, igual que el jamón, el lomo, … y que en media Europa ya saben decir “morteruelo”. Descubrimos el plato nacional estonio (rico, eh?, Marta?), los dulces polacos (de los que comprábamos a base de chupachuses de chicle), el plato nacional francés que resultaron ser las patatas al horno… Confirmamos que a los italianos les gusta la pasta, a los españoles nos gustaba la cerveza checa, y a los checos… la poción mágica: el RESOLI. =)

Después de unos bailes, el cansancio nos venció y nos fuimos a dormir prontito que hacía muuuucho sueño. Eso sí, hubo quien se quedó disfrutando de la noche en Hustopeche... ;)

1 comentario:

  1. EQUIPOOOOOOOOOOO CHECO!!!

    Pensába que éramos un equipo 10, pero al final se va a quedar en un 9'5... ¿¿¿¿DÓNDE ESTÁ EL RESTO DE CRÓNICAS???

    ¡¡¡Se van a juntar con las crónicas turcas!!!

    Besazos, Ana

    Besazos, Ahoi!

    ResponderEliminar